21 de agosto de 2010

It's a Wild World

La suerte no existe, pero tampoco se olvida. Es una ecuación subjetiva para cada uno de los habitantes de este mundo mal repartido. Son destellos a tiempo o a destiempo, sin lugar idóneo ni personas indicadas. Son las decisiones que tomamos sin darnos cuenta y que acaban determinando el camino. Estaba en aquel examen al que jamás te presentaste o en el lento caracol que, por error, tomó un atajo sin haberlo pretendido.

La suerte está en su cintura, y el afortunado ni siquiera se ha enterado de que ese papel al que su cartera hortera se ha acostumbrado es el único boleto ganador.

19 de agosto de 2010

20-10-08 del siglo pasado·

He perdido la cuenta de los días que hace desde que aquella especie de caja sorpresa que preguntaba por mi se ha roto y no quieres arreglarla. Creo que sin ella ya no puedo dar rodeos por tu cabeza y hacer que te preguntes por mi

Pero mira, si preguntaras te contaría cómo entre colmo y colmo amenza con escaparse el sol; cómo jugando con sonrisas conocidas y otras que empiezo a conocer parece que se asienta el presente sabiéndose vísperas de futuro. Entre ausencias y ausencias comentan que va faltando corazón y que entre haceres y sin hacer se deshace algo más que el tiempo. Por aquí los vacios se llenan como vasos, y los vasos se vacían conforme vas callando.. De disimulo en disimulo me pienso desapercibida de palabras indiscretas que sepan de ti..y me contento con el momento en el que de un hola" a un adiós".. no tenga que irme a ningún lado..


Para por si algún día se nos olvida. Para que nunca; para que siempre, para que por lo menos lo sepas.

16 de agosto de 2010

Continuidad

(Del lat. continuĭtas, -ātis).
1. f. Unión natural que tienen entre sí las partes del continuo.
2. f. Mat. Cualidad o condición de las funciones o transformaciones continuas
.


La continuidad se permitió 5 minutos hace unos pocos años. Ningún medio de comunicación lo anuncia, pero los estragos son importantes. De pronto y desde hace medio día tengo un perro de 90 años, ganas de fumar, viejas calles enormes que hoy se me presentan ínfimas, la sensación de haberte dejado de conocer y al siguiente instante pronosticar tu movimiento en falso.
Abuelos que envejecen, miradas que maduran, cambian para re-reconocerse y que al tiempo no acaban de coincidir. El próximo verano agoniza a esta hora, mientras te cruzas con vecinos que caes en la cuenta de no conocer.

El tiempo hoy corre mas deprisa que yo, antes contaba con la precisión suficiente para modificar la vida a lo largo del tiempo. Hoy el tiempo, por la espalda y sin previo aviso, se entretiene en transformar ligeramente la estructura del todo, sin espacio suficiente para darme cuenta de la fragilidad, de la tierra puesta por medio y de que la continuidad es el concepto mas incontinuo con el que he tropezado en los últimos 3 años.Sin duda, protagonista en la caída de la estabilidad y sólo superada por las miserias y grandezas de la improvisación.




Nada.
Lo mínimo.
Un poco.
1,87/4.
Una mitad.
Bastante.
3/4.
Casi todo.
Todo·

1 de agosto de 2010

31.07.10

No intentes enterrar el dolor: se extenderá a través de la tierra, bajo tus pies; se filtrará en el agua que hayas de beber y te envenenará la sangre. Las heridas se cierran, pero siempre quedan cicatrices más o menos visibles que volverán a molestar cuando cambie el tiempo, recordándote en la piel su existencia, y con ella el golpe que las originó. Y el recuerdo del golpe afectará a decisiones futuras, creará miedos inútiles y tristezas arrastradas, y tú crecerás como una criatura apagada y cobarde. ¿Para qué intentar huir y dejar atrás la ciudad donde caíste? ¿Por la vana esperanza de que en otro lugar, en un clima más benigno, ya no te dolerán las cicatrices y beberás un agua más limpia? A tu alrededor se alzarán las mismas ruinas de tu vida, porque allá donde vayas llevarás a la ciudad contigo. No hay tierra nueva ni mar nuevo, la vida que has malogrado malograda queda en cualquier parte del mundo. Tengo veintidós años, y hablo por boca de otros.

(Beatriz y lo cuerpos celestes.)

Es reconfortante no volver a sentirse tan identificada con un par de líneas que alguna vez fueron lo más parecido a un espejo. Enciendo un cigarro, sonrío y guardo en pdf el libro de los amores ridículos